El desarrollo de la motricidad fina es decisivo para el aprendizaje y desarrollo integral de todo niño. Además de permitirle al niño tener una mayor experimentación en su proceso de aprendizaje, juega un papel central en el aumento de la inteligencia.
La motricidad fina comprende todas aquellas actividades del infante que necesitan de precisión y un elevado nivel de coordinación. Se cree que la motricidad fina se inicia al rededor del año y medio de edad, cuando el infante, sin ningún aprendizaje previo, tiene una mayor coordinación en sus manos, gestos y cuerpo.
Para adquirir una mayor motricidad el infante necesita de un elevado nivel de maduración y un aprendizaje constante. Por esta razón, es indispensable iniciar a temprana edad el trabajo con actividades simples y continuar a lo largo de los años con metas más complejas y bien delimitadas.
A continuación están 10 divertidas actividades para infantes que ayudarán al desarrollo de su motricidad fina.
1. Hacer dibujos con bolitas de papel.
2. Hacer collares, pulseras o llaveros con cuentas.
3. Jugar con texturas (arena, piedras, líquidos etc).
4. Hacer figuras con plastilina.
5. Meter y sacar objetos de un recipiente a otro (puedes utilizar canicas, botones o incluso frijoles).
6. Pintar con los dedos.
7. Tocar algún instrumento.
8. Hacer Figuras con palitos de paleta.
9. Hacer figuras con limpia pipas.
10. Jugar con la tierra (puede ayudarte en el jardín).
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